En el año 2017, Lidia denunció a su pareja por abusar de su hijo. La causa esta caratulada como: “Abuso sexual simple gravemente ultrajante agravado por la convivencia preexistente con la víctima en concurso real más exhibición de pornografía”. “Quiero que vaya preso”, expresó en “Antes y Después”.

El 29 de septiembre del 2017, Lidia denunció a su pareja por enviarle a su hijo de 13 años fotos pornográficas. Pero el 2 de octubre, amplió su denuncia por violación. “Mi hijo me contó que mi ex pareja le había hecho cosas de grande”, contó en “Antes y Después” programa radial que se emite de lunes a viernes de 18:00 a 19:00 horas, por Radio Urbana, Lidia, madre del adolescente.

Desde ese momento Lidia, comenzó a peregrinar por los pasillos de los juzgados y comisarías de la ciudad de Río Gallegos. Pero, además también recorrió los pasillos del Hospital Regional, porque su hijo, quien tiene retraso madurativo, tras estos aberrantes hechos intentó suicidarse en varias ocasiones.

“Me tuvieron a las vueltas de un juzgado a otro y desde ese entonces no he parado”, manifestó esta madre que hace cuatro años espera que se haga Justicia y el agresor sexual de su hijo sea juzgado y condenado.

En este marco, contó que el expediente fue enviado a la Cámara Oral de la Primera Circunscripción en el año 2019: “Pero quedó estancada. El mes pasado me acerque a la Cámara, porque quiero que esta persona vaya preso. Presente todas las pruebas, fotos, el informe de la Cámara Gesell que le hicieron a mi hijo, presente los mensajes que este hombre le enviaba a mi nene”.

Entre los mensajes que presentó Lidia, existe uno en el que al agresor confesó que: “Lo había hecho y que no tenía miedo de ir preso. Pero él sigue libre, anda como si nada, se presenta a firmar en la Comisaría Sexta y cuando no va, se acerca un policía con los papeles a su casa para que el señor firme”.

Lidia y su familia viven preocupados por su hijo: “Ahora tiene 17 años, pero sigue con los miedos, está durmiendo en su cama y se pasa a la mía. Sigue con los temores”. En estos momentos el adolescente no está con asistencia psicológica: “Cuando se le brindó ayuda fue gracias a un medio de comunicación, que me escucharon y fue así que se movió un poco todo”.

Lidia está participando activamente de las marchas que realizan familiares de víctimas de abuso sexual. Lo hace para ayudar a otras familias: “Hoy me toco a mí, todos los días hay un caso nuevo, no se terminan más. Los abusadores siguen libres”.

Para Lidia, la Justicia va dejando de lado estos casos: “Se burlan de los niños. Con el caso de mi hijo tengo todas las pruebas, están todas presentadas y está la confesión de él en la que manifestó que violó a mi nene. Entonces que más pruebas quieren, pasaron cuatro años y un mes, sigo esperando Justicia, seguimos sufriendo, mi hijo tiene miedo porque el violador vive cerca, estamos pendiente de la hora que sale del colegio, a qué hora llega, vivimos con mucho temor”, finalizó.

Miércoles, 27 de octubre de 2021