Una empresa de turismo chilena transportaba un contingente de 54 turistas y 4 tripulantes se fue de El Calafate sin pagar cinco noches de alojamiento y dos cenas en un restaurante, cuyo propietario los persiguió hasta Tres Lagos, y les exigió el pago. Hay una causa judicial y el contingente ya está en Chile de regreso.

Un contingente de turistas chilenos se vio envuelto en un escándalo en El Calafate porque la empresa a la que contrataron el tour intentó estafar a un hotel, un restaurante y un transportista de esta ciudad.

AHORA CALAFATE pudo reconstruir la historia que en principio se pensó que tenía un único damnificado: el hotel Upsala. El contingente estaba conformado por 54 turistas chilenos (ancianos, adultos, jóvenes y niños) que se hospedaron en ese céntrico hotel durante cinco noches.

Era la primera vez que esa empresa contrataba ese alojamiento y se desconoce si ya tenía antecedentes comerciales en El Calafate. Lo cierto es que combinaron con el dueño del hotel que el pago se haría en efectivo durante la estadía.

El contingente llegó a última hora a esta localidad y decidieron ir a un salón gastronómico cuyo responsable ya estaba por cerrar. Sin embargo el hombre, cuyo nombre prefirió no publicar, les brindó el servicio y todos pudieron cenar, inclusive los cuatro tripulantes.

Al llegar el momento de pagar la tarjeta de crédito no tenía fondos suficientes. John Mora, el coordinador del grupo, le aseguró que le pagaría ya que todavía debían permanecer hasta el 12 de febrero. El propietario del salón aceptó la palabra y los dejó ir.

Al día siguiente el contingente regresó y volvió a cenar. Siempre argumentando problemas para que se acredite el dinero, y dificultades para hacer una transferencia de una suma tan grande, el coordinador argumentaba no poder pagar en ese momento, y aseguraba que lo iba a hacer y que no era su voluntad evadir el pago.

La empresa también contrató dos vehículos de transporte local para hacer la excursión al Glaciar Perito Moreno. Al llegar y no recibir el pago, su dueño le intimó a que lo haga porque iba a haber consecuencias serias.

Ante esto el propietario del salón gastronómico volvió a darle una mano al coordinador y le prestó unos 15 mil pesos para completar el pago al transportista.

A todo esto ya había contactos con el propietario de la
agencia, oriunda de Temuco, para que active el pago de la deuda de las comidas y del hotel. Siempre con pedidos de disculpas y promesas de una inmediata solución, pero lo cierto que el dinero no aparecía. Además el coordinador aseguró que él se quedaría como garantía de voluntad de pago, hasta que el dinero sea depositado.

Desde Chile solo le enviaron unos 40 mil pesos, que se le abonó al hotelero. La suma era menos del 10 % del total que debía pagar, que asciende a los 430 mil pesos.

Lo cierto es que llegó el miércoles 12 de febrero y cerca del mediodía el contingente se fue con rumbo a Bariloche. Y sin que se diera cuenta la gente del hotel, el coordinador (que había prometido quedarse) se fue también en el ómnibus.

Al enterarse de la situación el dueño (de unos 81 años) fue hasta al puesto de acceso de El Calafate y le confirmaron que el colectivo ya había salido a la ruta. El hombre regresó para hacer la denuncia policial y pedir que detengan al transporte.

En cambio el responsable del comedor salió a la ruta con su auto a perseguir al colectivo, al que pudo alcanzar en Tres Lagos. “Con todo lo que te ayudé y me haces esto”, le gritó indignado al coordinador ya en la sede policial de esa localidad.

Inclusive al enterarse de la situación, los pasajeros chilenos comenzaron a increpar al representante de la empresa de turismo por su actitud, y prometieron que iban a demandarlos al llegar a Chile.

El transporte quedó retenido unas horas en Tres Lagos, y finalmente desde Chile enviaron vía transferencia casi la totalidad de lo que debían al gastronómico.
El contingente pudo seguir viaje, mientras que el Juzgado de El Calafate inicia una causa por la estafa al Hotel. “Nunca en los quince años desde que estoy al frente del juzgado tuve un caso así”, dijo a FM DIMENSION el Juez Carlos Narvarte.

En tanto desde el hotel informaron que el sueño de la agencia, de nombre Saúl Abarzúa, aseguró que iba a pagar el monto adeudado. (Guillermo Pérez Luque).

Sábado, 15 de febrero de 2020