Connivencia con propietarios de locales nocturnos, violación, apremios ilegales, corrupción y violencia de género, son algunas de las causas que involucran a Comisarios, Subcomisarios y personal subalterno de las Comisarías de Las Heras. Desde que se conocieron estas denuncias, la Jefatura de Policía no emitió ningún comunicado, afirmando o desmintiendo estas circunstancias que ponen nuevamente en tela de juicio a la institución policial.

Mientras que en Río Gallegos algunos integrantes de la Jefatura de la Policía de la provincia de Santa Cruz mantienen internas “ridículas” para quedarse con algún cargo, y se alimentan de "chimentos", en las Comisarías de Las Heras se viven verdaderos escándalos que involucran a sus efectivos.

Estos casos no son de ahora, vienen desde hace más de un mes, pero a la plana de la Policía parece no importarle, o quizás no saben cómo manejar a sus efectivos lasherenses quienes son noticias todos los días, dejando nuevamente mal parada a una institución que en este último mes estuvo más preocupada en cubrir la seguridad en las distintas fiestas nacionales que tuvieron lugar en la mayoría de las localidades santacruceñas.

Policías, blanco de denuncias

La ola de denuncias contra los efectivos de la Comisaría Primera de Las Heras, comenzaron el 18 de enero, cuando se conoció la violación sexual de una agente dentro de un patrullero, donde la víctima fue acosada laboral y sexualmente por un cabo primero.

Seis días después, el 24 de enero, fue denunciado el comisario por connivencia con empresarios de locales nocturnos, y desempeño indebido de la función ya que daría “clases de bachata en el quincho de la comisaria tres veces por semana” a la vista de todo el personal. Pero ahora, además está siendo investigado por la compra millonaria de una estancia.

Lamentablemente allí no terminaron las denuncias, el 20 de febrero, tres efectivos fueron denunciados por golpear brutalmente a un joven con discapacidad, frente a un local comercial.

Hoy, cinco días después, otra denuncia pone en tela de juicio a la Policía de la Provincia de Santa Cruz, luego de conocerse que un sargento, quien habría golpeado al joven con discapacidad-, fue denunciado por violencia de género, y de haber dejado a su mujer –también policía- en terapia tras propinarle una salvaje golpiza. Además se conoció que este sargento había sido acusado por una situación similar, tiempo atrás.

Lo más grave de esta denuncia, es que allegados a la víctima sostuvieron que en la ciudad se intentó ocultar el episodio porque de salir a la luz empeoraría la situación de la jefatura, ya que el violento habría contado con la complicidad de dos oficiales mujeres, quienes lo habrían ayudado a ocultar el hecho.


Lunes, 25 de febrero de 2019