AUSTRALIA
La pareja australiana ahora quiere tener al bebé con síndrome de Down
El padre biológico del niño presuntamente abandonado por su discapacidad dio una entrevista en la que negó haberle pedido a la madre subrogada que aborte.
La pareja australiana que presuntamente abandonó en Tailandia a un bebé con síndrome de Down tras contratar un vientre de alquiler afirma ahora que lucharán por su custodia.
En la primera entrevista concedida por el matrimonio después del escándalo formado por el supuesto abandono, el padre biológico de la criatura, David Farnell, declaró que pretenden luchar por el hijo, a quien llamaron Gammy.
El pequeño de siete meses permanece en Bangkok con la tailandesa Pattaramon Chanbua, la mujer que alquiló su vientre a los australianos y quien denunció el abandono y la adopción de la hermana melliza de Gammy, Pipah, quien goza de buena salud.
"Nosotros nunca te dijimos (Pattaramon) que puedes quedarte con el bebé", le dijo Farnell a Pattaramon en una entrevista concedida a Channel Nine.
Según la versión relatada por el padre, abandonaron Tailandia sin Gammy porque tenían "miedo de perder también a la pequeña" Pipah.
Pattaramon negó cualquier posibilidad de devolver el bebé al matrimonio australiano en feclaraciones publicadas por el diario Sidney Morning Herald.
"Cuidaré de mi bebe hasta que muera... nadie va a llevarse a mi bebé de mi lado", aseguró la mujer tailandesa, antes de añadir: "están soñando, son culpables de abandonar a Gammy y ahora creen que pueden salirse con la suya".
En versiones anteriores, la pareja australiana declaró que los doctores tailandeses les dijeron que el pequeño con síndrome de Down no sobreviviría al nacer con problemas cardíacos.
"Nunca lo abandonamos, nunca le pedimos a la madre subrogada que tuviera un aborto", respondió Farnell a las acusaciones realizadas por la mujer tailandesa.
No obstante, el padre admitió que la idea del aborto se les pasó por la mente "porque el bebé tenía una discapacidad y es una cosa muy triste. Hubiera sido difícil, no imposible, pero difícil", señaló.
Farnell, quien durante su juventud fue condenado por varios cargos de abuso a menores, asegura que cuando terminen los procedimientos legales para que Pipah esté registrada como australiana, irán por el pequeño Gammy.
Pattaramon, que declaró que la pareja le ofreció US$15 mil por gestar un hijo para ellos, pidió la devolución de la nena tras conocer los problemas del padre con la Justicia.
El caso provocó una gran polémica en la sociedad australiana donde las autoridades intensificaron el cierre de agencias que se dedican a encontrar vientres de alquiler en Tailandia.
Las autoridades tailandesas abrieron una investigación sobre el uso de estas madres de alquiler, recurso que según la ley local sólo está autorizado en el caso de que la mujer sea familiar de los padres y prohíbe que la gestación se haga a cambio de dinero.
Lunes, 11 de agosto de 2014
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