La decisión la tomó el presidente Juan Manuel Santos luego de acusar a esa organización guerrillera de atacar un puesto militar en el departamento de Cauca y provocar la muerte de 11 uniformados. Desde las FARC acusaron al gobierno de ordenar operativos en medio de la tregua.

El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, anunció su decisión de reiniciar los bombardeos sobre posiciones de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) luego de atribuir a ese grupo guerrillero el ataque ocurrido el martes pasado en el departamento del Cauca, en el sudoeste del país y que provocó la muerte de 11 militares y heridas a otra veintena.

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De acuerdo con el ejército colombiano el martes cerca del mediodía, efectivos del Batallón de Combate Terrestre de la Fuerza de Tarea Apolo, fueron atacados con artfactos explosivos, granadas y armas de fuego.

"El incidente fue producto de un ataque deliberado, no fortuito, de las FARC y esto implica un claro rompimiento de la promesa de un cese al fuego unilateral", dijo Santos desde la ciudad de Cali, tras una reunión con autoridades del departamento del Cauca y mandos del ejército y la policía.

"He ordenado a las Fuerzas Armadas levantar la orden de suspensión de bombardeos a los campamentos de las FARC hasta nueva orden", anunció ayer el mandatario.

Se trata del hecho más grave en el marco de la tregua unilateral anunciada por el grupo rebelde el pasado 20 de diciembre. "Este es un hecho condenable, que no quedará impune y exige medidas contundentes y tendrá consecuencias", dijo Santos en su declaración.

Desde 2013, representantes del gobierno y del grupo armado se encuentran reunidos en La Habana, Cuba, en medio de un proceso de diálogo para poner fin al conflicto interno más antiguo del hemisferio occidental. El fiscal general de Colombia, Eduardo Montealegre, dijo en la misma conferencia de prensa del presidente que el gobierno considera el ataque un "homicidio en persona protegida", y un "hecho de grave violación a los derechos humanos por parte de las FARC".

Montealegre advirtió además que intentarán establecer si hay civiles involucrados en el hecho.

Por su parte, uno de los voceros de las FARC en La Habana, Pastor Alape, afirmó que "tales hechos, a todas luces, son consecuencia de la incoherencia gubernamental de estar ordenando operativos militares contra una guerrilla en tregua".

Y agregó: "El país está esperando la noticia del cese bilateral de fuegos, señor presidente".


Jueves, 16 de abril de 2015